Descubre cómo aprovechar todo el sabor y textura de la papaya en deliciosas recetas.
La papaya es una de las frutas tropicales preferidas por todos, debido a su increíble gusto dulce y textura cremosa, jugosa y suave que convierten a este ingrediente en uno muy versátil al poderse consumir fresca o agregar a ensaladas, jugos, helados, cremas y otras preparaciones donde además de su delicioso aroma y sabor también aporta mucho color a las recetas.
LA PAPAYA ES UNA FRUTA EXTRAORDINARIA
La papaya es originaria de México y desde su aparición ha hecho parte de los desayunos de todo el mundo por ser una fruta económica y de la cual podemos sacar un gran provecho por ser muy carnosa y con una alta composición de agua. Se reconocen fácilmente al tener una característica forma ovalada con una piel que no es comestible de color amarillo verdoso que a medida que va madurando, se va tornando hacia un tono amarillo-naranja.
La magia ocurre al abrirla, descubriendo una deliciosa pulpa de color naranja que dependiendo de la variedad se pueden encontrar de una tonalidad pálida o más vibrantes, la cual forma en su interior una cavidad con muchas semillas redondas, resbaladizas y negras que al consumir la pulpa suelen desecharse, pero lo que muchos no saben es que son comestibles.
¿CÓMO CORTAR UNA PAPAYA?
Para poder disfrutar todo lo delicioso que nos ofrece la papaya, es necesario cortarla para sacar su pulpa y comerla en fresco o como ingrediente en variadas preparaciones. En Recetas Nestlé® te contamos con un sencillo paso a paso cómo hacerlo más fácil.
- Comienza colocando la papaya en una tabla de cortar de forma horizontal.
- Con un cuchillo grande y afilado corta la papaya por la mitad, para tener dos partes iguales y separadas.
- Con la ayuda de una cuchara o la punta del mismo cuchillo que se está utilizando, raspa el borde de la cavidad para retirar las semillas de papaya, estas se desprenden con gran facilidad así que no es necesario ejercer mucha fuerza.
- Muchos acostumbran a desechar estas semillas, pero lo mejor es reservarlas ya que son comestibles y más adelante te contaremos cómo aprovecharlas.
- Cuando tengas la papaya libre de semillas es el momento de retirar la cáscara, para esto sostén la fruta verticalmente y pasa finamente el cuchillo o un pelador de papas para retirar largas tiras de piel, procura sacar rebanadas delgadas para no perder mucha fruta.
- Acomoda la papaya de modo que la cavidad quede sobre la tabla de corte para sacar rodajas y si lo deseas más pequeños, sigue cortando en dirección contraria para obtener cubos de fruta.
- Así de fácil tienes una papaya pelada y cortada para disfrutar al desayuno o para emplear en cualquier preparación.
¿CÓMO APROVECHAR LAS SEMILLAS DE PAPAYA?
Al cortar la papaya encontramos que a lo largo de la cavidad del centro hay muchas semillas negras y brillantes que siempre terminan en la basura cuando extraemos la pulpa, desconociendo que son una parte más comestible de la fruta.
A muchos les molesta su textura húmeda y resbaladiza, pero por muy loco que suene tanto la semilla fresca como la seca poseen múltiples usos culinarios, donde las primeras tienen un sabor muy amargo y fuerte que a la mayoría les disgusta, pero en cambio las deshidratadas tienen un gusto picante, llegando a ser muy usadas en recetas como condimento siendo un perfecto sustituto de la pimienta. A continuación, te contamos cómo darle un nuevo uso a este ingrediente.
- Para empezar, las semillas que se reservaron al momento de cortar y pelar la papaya se deben enjuagar muy bien con agua, frotándolas con las manos, un colador o exprimiendo una por una hasta retirar la capa gelatinosa que tienen.
- Se debe retirar el exceso de agua con una toalla de papel y se esparcen en una bandeja para ponerlos a secar al sol o de forma más rápida llevándolos al horno a baja potencia.
- Una vez estén deshidratadas se trituran o muelen en un mortero hasta conseguir un polvo fino que puede usarse en la cocina como sustituto de la pimienta negra.
USOS CULINARIOS CON LA PAPAYA
La papaya es el ingrediente ideal para preparar una gran variedad de platos, desde su consumo en fresco en ensaladas o jugos, hasta encontrarla transformada para la elaboración de salsas o postres. Sigue leyendo para descubrir algunas ideas fáciles para incluir esta popular fruta en tu menú.
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ENSALADAS CON PAPAYA
La forma más común de comer papaya es en fresco, ya que de esta forma disfrutamos de su dulce sabor y textura cremosa que se deshace en la boca, sin mencionar que en esta presentación se aprovechan más sus propiedades. Este alimento es tan versátil que combina tanto con ingredientes dulces como salados encontrándolos en ensaladas de frutas ideales para el desayuno o de verduras para la hora del almuerzo, donde además de aportar color a cualquier plato balancea y refresca el paladar en cada bocado.
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MERMELADA DE PAPAYA
Las mermeladas son dulces que se consumen en desayunos, snacks, postres, entre otros. Lo cierto es que la papaya no es un sabor que sea muy popular dentro de esta categoría pero que, sin duda al combinar con otras frutas como la naranja o la piña, dan como resultado un untable perfecto para disfrutar a cualquier momento del día.
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JUGOS DE PAPAYA
La papaya también es una fruta muy interesante para usar en jugos, té fríos o batidos donde su dulce sabor y textura cremosa es ideal para disfrutar en días calurosos. Para tener un poco de variedad, se puede combinar con otras frutas tropicales como el mango, el coco, kiwi, banano, entre otros, al igual que su base líquida que según los gustos y preferencias puede ser en agua o con algún tipo de leche ya sea de origen animal o vegetal.
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SALSAS CON PAPAYA
No es muy común encontrar salsas elaboradas con papaya, pero las pocas que existen son una verdadera delicia al combinar perfectamente con ingredientes que nunca lo hubiéramos imaginado, por ejemplo, con mango, jalapeño, pimentón rojo y chipotle para crear una deliciosa salsa fresca que se usa como aderezo en los tacos de pescado.
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POSTRES CON PAPAYA
En el mundo de la repostería también se puede disfrutar todo el sabor que nos ofrece la papaya con recetas fáciles y rápidas como mousse, flan, helados y pasteles.
¿CÓMO CONSERVAR LA PAPAYA EN CASA?
Teniendo la idea que una alimentación balanceada requiere incluir al menú más vegetales y frutas, cuando visitamos el supermercado vemos en las papayas una opción económica y muy fácil de consumir llevando esta fruta a casa, el problema está en que se maduran rápidamente y si no se consume de inmediato o se almacena inadecuadamente se estropeará a los pocos días. Para alargar su vida útil en casa sigue las siguientes recomendaciones.
- Si después de la compra se desea consumir a los pocos días, se recomienda dejar la fruta entera con la piel a temperatura ambiente. Un error que muchos cometen es dejarlas en la misma bolsa de compra, ya sea de plástico o papel, ya que allí se madurarán rápidamente adquiriendo una textura de papilla y un desagradable olor fuerte.
- Como en el mercado se encuentran frutas de diferentes tamaños, sabemos que hay ocasiones que después de abrirlas en imposible consumirla por completo, por lo que se recomienda retirar sus semillas y piel, cortarla en rodajas o cubos y guardarlas en la nevera en un recipiente con tapa, de este modo alargarás su vida útil entre 3 a 5 días más.
- Pero si, por lo contrario, no tienes planes de consumirla en los próximos días, la mejor idea es conservarla en el congelador. Para esto es necesario tener la papaya lista y cortada para llevar a recipientes rígidos o bolsas resellables y la así fruta podrá durar hasta 8 meses allí. Sin duda alguna, después de descongelada no quedará con la misma textura cremosa que la fruta fresca, pero con un poco de agua, leche y hielo será una gran opción para preparar jugos o batidos que tu boca paladar agradecerá en los días calurosos.
Si quieres incorporar en tu alimentación más frutas y verduras, descubre en Recetas Nestlé® cómo sacarles todo el jugo con ideas deliciosas y sorprendentes para preparar en familia. Sorpréndete con una receta nueva cada día.